⚔️ La última carga de los Búlgaros Ciegos
(Batalla de Belasitsa, 1014 d.C.)
Año 1014. El emperador bizantino Basilio II (apodado luego "el Bulgaróctono" = el Matador de Búlgaros") intenta conquistar Bulgaria desde hace años… y siempre choca contra el mismo hombre: el zar Samuel de Bulgaria, maestro de la guerra de montaña y rey de la resistencia eslava.
Basilio IISamuel está agotado, pero lucha con ferocidad. Se atrinchera en los Montes Belasitsa, un paso angosto entre acantilados, protegido por murallas de madera y empalizadas. Es una fortaleza natural, casi imposible de tomar.
Basilio II ataca, pero los búlgaros resisten con violencia. Entonces aparece un estratega bizantino desconocido llamado Nicéforo Xifias que ejecuta un plan enfermizo: rodear las montañas por un paso inexplorado y atacar por la espalda en una emboscada total.
Los búlgaros son aplastados. Miles son capturados. Samuel logra escapar… pero lo que hace Basilio II con los prisioneros es uno de los actos más terribles de la Edad Media.
Samuel de Bulgaria👁️ El castigo más brutal que recuerda la historia
Basilio captura 14.000 soldados búlgaros. Y en vez de matarlos, ordena CEGARLOS A TODOS.
Pero aún peor: en cada grupo de 100 hombres deja solo a uno con un ojo, para que vaya guiando a los demás de vuelta a su rey Samuel.
Imagina la escena: 14.000 hombres avanzando a tientas, unidos con cuerdas, sangrando de las cuencas, guiados lentamente por un tuerto entre montañas.
Cuando Samuel ve a sus soldados volver así, cae fulminado de un infarto. Literal: muere de horror.
🛡️ La última carga
Sin rey y sin esperanza, el ejército búlgaro debería rendirse. Pero no lo hace. Un general llamado Ivats reúne a los ciegos que aún pueden sostener una espada y jura que lucharán una última vez.
El general IvatsDías después, cuando los bizantinos celebran su victoria, los últimos búlgaros cargan a ciegas contra ellos, gritando el nombre de Samuel. Van guiándose por el sonido de los tambores enemigos. Son derrotados y aniquilados, pero su carga queda para siempre como uno de los actos más salvajes de honor militar.
⚔️ La Batalla de Montgisard (1177)
El rey leproso que derrotó solo a Saladino
Año 1177. Tierra Santa. El Reino de Jerusalén está débil: rodeado de enemigos, dividido internamente y casi sin soldados. Su rey es Balduino IV, un muchacho de apenas 16 años… que tiene lepra. Una enfermedad incurable que le está devorando nervios y carne. No puede sentir el dolor y sabe que va a morir joven.
Por ItwasntSuperman - Trabajo propio, CC BY-SA 4.0,Su enemigo es Salah ad-Din —Saladino—, el unificador del Islam, genio militar y héroe del mundo árabe. Reúne un ejército gigantesco: 26.000 soldados y entra en el reino para destruir Jerusalén… para siempre.
Balduino tiene solo 600 caballeros templarios y unos 3.000 soldados. Está completamente superado. Todos le dicen que huya a refugiarse. Pero su respuesta pasó a la historia:
"Jerusalén no necesita un rey que huya."
— Balduino IV, el Rey Leproso
🚀 Una marcha suicida
Balduino se lanza al encuentro de Saladino atravesando desierto y rocas. Los templarios montan a caballo, el rey va con la mano cubierta porque ya no tiene sensibilidad. Llega exhausto a Montgisard, cerca de Ramla. De repente, desde una colina, ve el campamento de Saladino disperso y sin formación. Era el momento perfecto para atacar.
Saladino está convencido de que los cristianos no se atreverían jamás a atacar en inferioridad de 1 contra 8. Error.
⚡ El rugido de la carga
Balduino manda levantar la Vera Cruz, la reliquia sagrada del reino. Se arrodilla ante ella con todo su ejército detrás. Luego se levanta, monta a caballo con la mitad del cuerpo paralizado y da una sola orden:
Balduino IV ordenando la carga en Montgisard"¡Por Jerusalén!"
Los templarios y caballeros de Jerusalén cargan cuesta abajo a toda velocidad. Sin esperar. Sin reservas. Sin posibilidad de retirada. Una carga frontal directa contra el ejército más poderoso de Oriente.
El choque fue brutal. Los cruzados atravesaron las líneas musulmanas y fueron directamente a por el estandarte personal de Saladino, que tuvo que huir a caballo abandonando su campamento. Miles de musulmanes murieron ahogados al intentar escapar por los pantanos de Ramla.
Victoria total. Victoria imposible.