Hoy toca una batalla que a muy pocos nos sonará, de hecho a mi no me sonaba para nada hasta hace poco. Un fallo por nuestra parte ya que es una batalla tan crucial para la historia de Japón como la batalla de Kursk en la 2º G.M. o de Aqua Sextiae en la que el Imperio Romano contuvo a una horda inmensa de bárbaros del norte. Lógicamente no me refiero a similitud de combatientes ni situaciones, sino a dimensión e importancia de dicha batalla.
Bien pues como siempre, a situarte. Estamos en Japón a finales del siglo XVI. Japón lleva ya más de un siglo de luchas internas y guerra civil entre los diferentes señores feudales. Hay que dejar claro que el Emperador residía en la ciudad de Edo (Tokyo) en su palacio y era meramente un símbolo, no tenía poder político ni administrativo ni nada por el estilo, por lo que no influía todo lo que influiría en siglos posteriores.
La verdad que los nombres japoneses son bastante enredados y difíciles de recordar si nos aparecen siete u ocho bastante seguidos por lo que haré esto de un modo bastante simple ya que para estudiar en profundidad un hecho o acontecimiento están los libros y artículos de especialistas.
En nuestra historia están:
- Nobunaga: Primer señor feudal que puso los cimientos para la unificación de Japón. Avanzó bastante en la consecución de dicho objetivo.
- Hideyoshi: Tras ser Nobunaga asesinado por un general traidor, Hideyoshi logró restituir la calma y alzarse en el poder y continuar con la tarea de Nobunaga, lográndola terminar y unificar Japón bajo su mandato.
- Mitsunari: Magistrado del gobierno japonés.
- Tokugawa Ieyasu: El gran y famoso Tokugawa, general y miembro de del Consejo de los Cinco Regentes nombrado por Hideyoshi.
Como digo, hay muchos, muchísimos más personajes pero sino esto se convierte en un lío. El contexto de la batalla es, a grandes rasgos, el siguiente:
Nobunaga es el primero que se toma enserio la reunificación de Japón y seguramente lo hubiese conseguido si no lo hubiesen asesinado. Aún así, Hideyoshi continúa la misión y lo consigue. Tiene a todo Japón bajo su control y gobierna de tal manera que sentará las bases del futuro shogunato (una especie de reinado) Tokugawa. Hideyoshi muere en 1598 y no le precede su hijo debido a su minoría de edad. Se anticipó a esto creando el Consejo de los Cinco Regentes y procurándoles gobernar hasta que su hijo creciese. Aún así esta situación produce un vacío de poder bastante obvio.
Tokugawa empezó a establecer alianzas con figuras poderosas de todo el país por medio de matrimonios concertados con sus hijas. Esto puso en alerta a Mitsunari, que comenzó a reunir a todos los que pudiese en contra de Tokugawa. Intentó envenenarlo pero su plan fracasó.
Mientras Tokugawa se preparaba para reprender a un señor feudal rebelde le llegó una queja de Mitsunari y demás magistrados y de tres de los cuatro grandes ancianos (consejo de sabios) acusándolo de diferentes cargos (más de diez) entre los que se incluía usar a sus hijos con fines políticos o toma de castillos ajenos como propios.
Tokugawa se tomó esto como una declaración de guerra, que a decir verdad, más o menos era eso, por lo que a partir de ese momento tanto Tokugawa como Mitsunari se dedicaría a recorrer el país reclutando combatientes para la gran batalla, la batalla decisiva que decidiría el destino de Japón. A partir de ahora los ejércitos se conocerían como el "Ejército del Oeste" de Mitsunari o el "Ejército del Este" de Tokugawa.
Como digo, es un esbozo muy simple del contexto previo a la gran batalla, a quien le interese la historia japonesa y le parezca interesante esta parte (que lo es) le animo a que profundice por su cuenta.
Tras un año de reclutamientos y escaramuzas, tomas de castillos y pequeñas batallas, llega, como en todas las guerras, la batalla que decide el sino de esta. Estamos a 21 de Octubre del año 1600. El lugar, Sekigahara, lo elige Mitsunari, huyendo de las tropas de Tokugawa y esperando reagruparse y coger refuerzos y ventaja geográfica en dicho lugar. Tokugawa no lo rehúye y acepta el envite.
No se sabe a ciencia cierta el número de combatientes con exactitud. Lo que sí se sabe es que oscilaban entre los 80-100mil hombres por bando, siendo estos muy similares en cantidad de combatientes, es decir, ninguno tenía ventaja numérica sobre el contrario. Es de las batallas más grandes de Japón teniendo en cuenta que los dos bandos son japoneses al fin y al cabo.
Sekigahara, lugar de la batalla |
El día comienza con una espesa niebla que se disipa a eso de las 9-10 de la mañana, cuando los ejércitos llevan horas formados esperando a la orden de ataque. El ejército de Tokugawa es el primero en dar el paso y una parte de la caballería ataca. Posteriormente le sigue la infantería y al final terminan todos (los dos ejércitos) luchando sobre el terreno sin haber avances significativos para ningún bando. A pesar de que hay un cierto equilibrio, el ejército de Tokugawa va avanzando y Mitsunari retrocediendo. Esto es porque Mitsunari había reservado varios miles de hombres para hacerle la típica táctica envolvente a Tokugawa, es decir, dejar que se adentren en terreno de Mitsunari retrocediendo poco a poco para que la caballería e infantería reservados, en el momento justo rodeen el ejército de Tokugawa y crear una bolsa de la que no pueda salir un sólo soldado vivo.
La verdad que a pesar de ser una táctica algo primitiva y simple, si sale está muy bien ya que rodeas al enemigo y ya es muy difícil que se te escapen. Pero el destino no querría que ganase Mitsunari, y no porque no pudiese salir la táctica sino porque esta nunca llegó a cumplirse por culpa de algunos generales. No hay que olvidar que los generales de Mitsunari no eran más que señores feudales que se sometían voluntariamente a su generalato para tras ganar la guerra obtener favores y seguir mandando sobre sus súbditos. Por tanto, antes de generales eran señores feudales y su ejército no se movía si este no daba la orden. Así fue, al dar la orden de envolver al ejército de Tokugawa varios generales decidieron no moverse. Tras este acto de rebeldía y un poco de empuje de Tokugawa, varios generales menores se declararon también rebeldes y terminaron por minar la moral del ejército de Mitsunari, ejército que quedaría derrotado y en desbandada con el paso del día.
Muchos generales de Mitsunari fueron capturados y condenados a muerte. Esto si antes los propios generales no se habían suicidado con tal de salvaguardar el honor. Mitsunari huyó pero pocos años más tarde fue capturado y ejecutado.
Tras esta decisiva batalla, Tokugawa se convertía en señor/jefe (Shogun) de todo Japón, instaurando el shogunato de Tokugawa, el cual duraría más de 250 años, en el que una característica básica fue el cierre de Japón al exterior, cierre que duró varios siglos y con el que se condenaba a la muerte a cualquier extranjero que pisase tierras japonesas. Esto último lo digo como curiosidad y dato interesante (del cual se puede hacer perfectamente una entrada) y no como crítica al shogunato de Tokugawa pues 250 años dan para mucho más que para esta decisión.
El gran Tokugawa |
Saludos!
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